Desarrollar un buen marco teórico no es una tarea sencilla. Requiere una revisión exhaustiva de la literatura relevante, capacidad de síntesis y análisis crítico de las teorías e investigaciones previas. Sin embargo, son muchos los errores que se cometen habitualmente durante su elaboración.
Este artículo busca precisamente ayudar a prevenir esos problemas, identificando los desaciertos más frecuentes en el desarrollo del marco teórico y ofreciendo recomendaciones concretas para elaborar uno de calidad. Se exploran fallas como no vincular adecuadamente el marco conceptual con los objetivos del estudio, incluir referencias no esenciales o simplemente repetir lo que ya han dicho otros autores sin un análisis crítico.
Siguiendo los consejos que aquí se presentan, será posible construir marcos teóricos más consistentes y mejor integrados, que realmente aporten valor a la investigación. En definitiva, se trata de una guía esencial para sentar las bases teóricas de cualquier estudio académico.
Errores frecuentes en el marco teórico
Es común que en la elaboración del marco teórico se cometan algunos errores que terminan debilitando esta importante sección. Veamos cuáles son los más habituales:
No sustentar adecuadamente la investigación en literatura existente
Resulta fundamental basar nuestra investigación en el conocimiento previo y las teorías ya establecidas sobre el tema en cuestión. De lo contrario, estaremos «reinventando la rueda». Hay que revisar exhaustivamente la literatura relevante identificando ideas, enfoques y estudios que sirvan de antecedentes.
Incluir referencias no esenciales
A veces por querer impresionar se agregan muchas citas y autores que realmente no son indispensables, no aportan una perspectiva realmente necesaria o no están estrechamente vinculados al estudio. Esto solo contribuye a saturar y dispersar el marco teórico.
Repetir ideas sin aporte propio
No basta con parafrasear o resumir lo que ya han dicho otros investigadores. Es preciso aportar un análisis, evaluación o perspectiva crítica personal sobre esas teorías e ideas existentes. Debe haber creación de conocimiento nuevo.
No vincular adecuadamente marco teórico e investigación
El marco conceptual debe sustentar directamente los objetivos, las preguntas, hipótesis y en general todos los componentes centrales de nuestra investigación. Si no se integra debidamente, pierde relevancia.
Recomendaciones para elaborar un buen marco teórico
Hemos revisado los problemas más comunes en la elaboración del marco teórico. Veamos ahora algunas recomendaciones concretas para desarrollar uno de calidad:
Revisar exhaustivamente la literatura sobre el tema
Resulta indispensable leer lo máximo posible para conocer a fondo las teorías, enfoques, conceptos y estudios relevantes sobre nuestro objeto de investigación. Esta revisión bibliográfica es la base del marco teórico.
Seleccionar solo las referencias más pertinentes
Lo importante no es la cantidad de citas sino su verdadera relevancia y aporte al estudio. Se debe integrar únicamente la literatura que sea indispensable para construir el marco conceptual.
Vincular claramente marco teórico con objetivos e hipótesis
El sustento teórico debe apuntalar directamente los objetivos, las preguntas orientadoras, las hipótesis y demás elementos centrales de la investigación. Esta interrelación es vital.
Aportar un análisis crítico de la literatura
Más que describir teorías y estudios previos, se requiere evaluarlos, contrastarlos y extraer de ello una síntesis personal que enriquezca el estado actual del conocimiento en la materia.
Conclusión
Hemos explorado los problemas más frecuentes que se presentan en la elaboración del marco teórico y hemos brindado recomendaciones concretas para evitarlos. En resumen:
Es vital basarse en literatura existente
Partir de teorías y estudios previos nos da una base conceptual sólida y nos impide cometer errores ya superados.
Las referencias deben ser verdaderamente relevantes
Importa más la calidad que la cantidad de citas. Todas deben aportar valor y sustento real a nuestra investigación.
El marco teórico debe integrarse plenamente
No puede ser una sección aislada o decorativa. Las bases conceptuales deben entrelazarse bien con todos los elementos del estudio.
Se requiere análisis crítico de fuentes
No es suficiente con describir teorías e investigaciones existentes, es preciso evaluarlas, contrastarlas y extraer nuevas comprensiones.
En definitiva, un buen marco teórico no es fácil de desarrollar, pero siguiendo los consejos aquí planteados pueden evitarse muchos dolores de cabeza y sentar bases conceptuales mucho más sólidas para cualquier investigación académica.